Ya es primavera

Como con los cumpleaños, inevitablemente me salto los días correctos, pero bueno, la primavera no es una cabreada amiga que me pregunté con cara de circunstancia "¿¡Cómo has podido olvidarte!?"

Aquí ya huele distinto. Después de una semana de mucha niebla, humedad y frío, este calorcito y suave brisa son un cambio que el humor de la gente agradece. Muchachas con gafas y cortos vestidos florales en bicicleta (como salidas de un cliché), la gente hablando y sonriendo en vez de mirar embobados sus smartphones mientras caminan a toda prisa escuchando sus mp3, el césped cubierto de gente tumbada y las clases medio vacías. Hasta en las casas, andando fuera por la calle, uno nota ese algo distinto. En facebook, cómo no, también. Os dejo un descubrimiento que hice gracias a un australiano, y una palabra sueca que expresa ese estado del que hablo:

vårkänslor!

¡Un saludo!